VIENTOS DE GUERRA

Soplan vientos de locura, tristeza y muerte en nuestro continente. Soplan vientos de guerra en Latino América para desgracia de todos nosotros.

El petro-megalómano Chávez Frías de Venezuela se encarga todos los días de que soplen estos vientos cada vez con mayor fuerza.

Lo obvio es su – en buena medida – inventado conflicto con Colombia.

Conflicto que no es más que la clásica estrategia de los dictadores de buscar soluciones bélicas y patrioteras a su propia ineptitud como gobernantes.

Esto no deja de ser grave, pero quizás la situación en el resto de nuestro continente y más al sur sea más preocupante.

Las conexiones de Chávez y su gobierno con las FARC colombianas son indiscutibles y además comprobadas.

Venezuela les provee a esta banda de asesinos y narcotraficantes, refugio, armas y apoyo logístico.

Más grave, Chávez en sus delirios pan- continentales usa a las FARC como sus embajadores de violencia en el resto del continente.

En su plan de emular a Bolívar usa a las FARC como una especie de cabeza de puente violentista siguiendo la cordillera de los Andes hacia el sur.

Sabido es que el norte de Brasil en la zona limítrofe con Perú es huésped de partidas de guerrilleros de las FARC aparentemente buscando establecer un foco de actividad guerrillera en esa zona.

Son conocidos además los contactos entre los enviados de Chávez y los nihilistas de Sendero Luminoso a quienes se les proveen armamento y apoyo logístico.

Más al sur en Bolivia la estrategia es distinta.

En ese país Chávez tiene al tontuelo de Evo morales para hacerle los mandados.

De ahí que no precisa fomentar movimientos clandestinos sino que directamente provee de pertrechos y entrenamiento militar a Bolivia en un régimen de gobierno a gobierno sin muchas vueltas.

Lo que sí es grave es que a su vez desde Bolivia se fomenten actividades de grupos guerrilleros en Argentina y Paraguay.

En este momento en Paraguay funciona lo que parece ser una columna de una organización que se denomina Ejército Popular Paraguayo que tiene secuestrado en actualmente al ganadero Fidel Zabala pidiendo por él un rescate, además de concesiones políticas departe del gobierno del presidente Lugo.

En el norte argentino concretamente se han detectado en la provincia de Jujuy, limítrofe con Bolivia, focos de actividad guerrillera que disfrazados de y en cooperación con algunos proyectos de autogestión indígenas parecerían estar preparando una ofensiva de guerra de guerrillas en esa lejana provincia.
En nuestro país aparecen arsenales sin que aparezcan sus dueños.

Se sospecha que jóvenes uruguayos han recibido entrenamiento militar en Venezuela y un ex-guerrillero amigo de Chávez está muy cerca de ser electo presidente; todo lo cual es poco alentador para la estabilidad interna del Uruguay sin considerar las implicancias regionales.

Lo que queda claro es que la estrategia parecería ser emular las campañas de San Martín pero al revés usando la cordillera como base de expansión del teatro de operaciones de la guerrilla.

Una vez establecido y arraigado la cabeza de puente en la montaña, expandirse hacia la planicie costera representada por la provincia de Buenos Aires, Uruguay y el sur de Brasil.

Si se lograra este objetivo, cosa difícil pero no imposible con gobiernos afines en Uruguay y Argentina, en los hechos el gran escollo para las ambiciones bolivarianas de Chávez, Brasil, se vería virtualmente rodeada por fronteras enemigas y en una situación de relativa indefensión ante un ataque coordinado de baja intensidad en todo su contorno geográfico.

Brasil es sin duda el gran escollo para los delirios hegemónicos de Chávez Frías.

Si, por designio o accidente, lograra el venezolano neutralizar al gigante de nuestro continente, cosa poco probable pero no imposible repito, entonces la otra piedra en su zapato, la antigua Nueva Granada hablando en términos bolivarianos sería relativamente más fácil de dominar.

La gran incógnita siendo el rol a jugar por los yanquis con sus bases en ese territorio.

De ahí seguramente el permanente enojo del delirante proto-dictador Venezolano por esas bases ya que ellas serían un hueso duro de roer para él y sus fuerzas armadas.

Chávez frías tiene sin lugar a duda una visión Napoleónica de su rol en la historia de nuestro continente.

Se le presentan dos grandes escollos, Brasil y los E.E.U.U.

Por cierto no son escollos menores pero si el pudiera lograr llevarlos a una política de ‘apaciguamiento’ hacia sus ambiciones entonces estas se volverían más factibles en el corto plazo.

En el mediano plazo sin embargo como todos los que lo antecedieron, su destino sería indefectiblemente napoleónico pero no sin antes, al igual que Bolívar, o Napoleón en Europa, haber hundido a los pueblos del continente en un verdadero baño de sangre.

Este escenario un tanto aventurado lo reconozco, se vuelve bastante menos aventurado si este personaje a través de sus contactos con Irán lograra tener capacidad nuclear, cosa bastante probable si es que a irán no se la detiene en sus propias ambiciones nucleares ofensivas.

Para terminar una par de reflexiones.

La primera sería como decía Locke,’ para que triunfe el mal sólo es menester que el bien no haga nada’.

La segunda sería que: ‘El que siembra vientos recoge tempestades’.

El Tte Cnel Chávez Frías haría bien en recordar estas palabras.

Mientras tanto sin embargo, los latinoamericanos no debemos olvidarnos que Argentina le debe a este megalómano varios miles de millones de dólares.

Paraguay está en situación análoga.

Bolivia es virtualmente un satélite político de Venezuela.

Los uruguayos a través de compras de petróleo somos deudores de Chávez por más de 500 millones de dólares.

No contabilizando por cierto, favores de otro tipo, que seguramente debe algún sector importante de nuestro país a este oscuro personaje.

Como todos los dictadores de pacotilla habrá que ver hasta donde llega Chávez Frías.

Hasta ahora las cosas se vienen dando a su favor.

Esperemos que en algún momento los latinoamericanos y los venezolanos fundamentalmente, nos despertemos y consignemos este peligroso personaje a su morada natural.

El basurero de la historia.

Hasta que no lo hagamos soplarán vientos de guerra en nuestro continente.