Fragata Britanica Tipo 42
El gobierno británico atribuyó hoy el envío de una nueva fuerza naval hacia las Islas Malvinas, cuya soberanía reclama Argentina, a la necesidad de garantizar la protección de los pobladores del archipiélago del Atlántico del Sur.
La disputa territorial, que originó un conflicto bélico en 1982 tras la prolongada ocupación militar de Londres, se reavivó esta semana a raíz de un permiso a empresas británicas para exploraciones petroleras en lo que Buenos Aires considera como suya la plataforma continental.
El ejecutivo del Primer Ministro Gordon Brown desconoció la reciente normativa argentina que establece como obligatorio un permiso de navegación hacia y desde las Islas Malvinas en sus aguas jurisdiccionales al aducir los derechos de Reino Unido para continuar con las labores de prospección de petróleo y gas frente a las islas.
Aunque el Ministerio de Defensa aseguró que mantiene el mismo nivel de efectivos alrededor del archipiélago y Brown dijo que no había necesidad de reforzar las fuerzas en la zona, medios periodísticos británicos confirmaron el traslado a la región de una flotilla naval de dos barcos y un buque cisterna.
El diario The Sun informó que hasta tres barcos fueron a unirse a los buques de patrulla regular en las islas australes.
Una fuente de la institución castrense declaró este jueves que el contingente británico de disuasión en el Atlántico Sur no ha aumentado y Reino Unido está "plenamente comprometido con los territorios de Ultramar, que incluyen a las Islas Malvinas, desgajada por la fuerza de la soberanía argentina, en 1833.
Según el portavoz del Ministerio de Defensa, la presencia militar comprende una amplia gama de efectivos y medios de tierra, aire y naval.
Londres emplaza allí una fragata, un destructor, una patrullera, dos buques y mil 76 militares, en desmedro de los reclamos de soberanía de Argentina.
En medio de las protestas de Buenos Aires, el Primer Ministro británico dijo que su país tenía derecho a las exploraciones de crudo y gas para futuras extracciones y debían asegurarse de los preparativos.
La oposición conservadora presiona al gobierno laborista de Brown al exigir una mayor presencia naval en la zona.Un incremento militar británico no dejará ninguna duda sobre la fuerte posición de Reino Unido, afirmó el representante parlamentario del partido Conservador en asuntos de Política Exterior, William Hague.
El Ministerio de Asuntos Exteriores restó importancia a la demanda argentina, al insistir en que los mares alrededor de las Malvinas fueron controlados por autoridades de la isla y no se verían afectados por el decreto de Buenos Aires.
Según un dictamen de la compañía Desire Petroleum, existen seis áreas en la plataforma marítima con una capacidad estimada de 3,5 mil millones de barriles de petróleo y nueve billones de pies cúbicos de gas natural.
Geólogos sostienen que lecho del océano austral que rodea las Islas Malvinas podría albergas ricas reservas energéticas.
La Guerra de las Malvinas se prolongó dos meses con un saldo de 649 argentinos muertos y 255 británicos.
AGENCIA PL
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